Receta para Albóndigas de ternera en salsa de tomate

  • 500 g de carne picada (mezcla, pollo-pavo, para que queden más jugosas).
  • 3 rebanadas de pan de molde sin corteza (unos 80 g aproximadamente) y un plato con leche entera para remojar la miga del pan
  • 2 huevos
  • Sal, nuez moscada y pimienta negra recién molida (al gusto)
  • 1 diente de ajo (si os gusta con más sabor 2)
  • 1 plato de harina de trigo para pasar las albóndigas
  • Aceite de oliva virgen extra (para freír las albóndigas y las patatas fritas)
  • 8 patatas grandes
  • Para la salsa de tomate: 2 latas grandes de tomate natural pelado (780 g x 2), aove, 1 diente y medio de ajo, sal, pimienta negra y una cucharada de azúcar.

Preparamos la salsa

  1. La salsa os servirá para hacer otros platos con productos de Biocarne! La podéis hacer en cantidade y la que sobre la guardamos en tarros y metemos en la nevera.
  2. Con los tomates enteros pelados de una lata y retiramos el líquido. 
  3. En una cazuela ponemos 5 cucharadas de aceite y mientras se calienta pelamos los ajos y cortamos finos. Añadimos a la cazuela los ajos finos, los doramos y cuando comiencen a tener color ponemos los tomates y los partimos a la mitad.
  4. Dejamos pochando hasta que reduzcan a menos de la mitad de su tamaño, más o menos 30 minutos a fuego lento. 
  5. Añadimos una cucharadita de azúcar para reducir acidez, una pizca de sal y pimienta negra recién molida. Si os gusta el orégano, tomillo o albahaca podéis tunear vuestra salsa. Removemos todo bien juntando sabores.
  6. Probamos y rectificamos con sal. Removemos unos minutos, apartamos del fuego y terminamos pasando la salsa por el chino para que quede fina.

Preparamos las albóndigas

  1. Las albondigas de ternera de Biocarne vienen preparadas por lo que solo debemos salpimentar. Rompemos los 2 huevos y los añadimos junto con la nuez moscada. Las rebanadas de pan sin la corteza que previamente hemos remojado en leche durante unos minutos. Y por último el ajo machacado o muy picado.
  2. Removemos todo bien con las manos hasta que se mezclen los ingredientes. Esta será la base de nuestras futuras albóndigas.
  3. Sin miedo empezamos a trabajar la masa haciendo pequeñas (o grandes, eso al gusto) pelotas que luego pasaremos por harina. Las dejamos en un plato a la espera de la sartén.
  4. Las sacudimos un poco para retirar el exceso de harina y freímos en aceite de oliva virgen extra bien caliente. Unos tres minutos son suficientes y reservamos.
  5. Pasamos las albóndigas a la cazuela con la salsa de tomate recién hecha. Calentamos a fuego medio hasta que quede una salsa de tomate ligeramente espesa (por la harina) durante unos 10 minutos.
  6. Dejamos que reposen unos 5 minutos mientras freímos las patatas con el tipo de corte que más te guste.

¡QUE APROVECHE!